El 17 de enero de 2025, el Tribunal Supremo de Estados Unidos respa ldó por unanimidad una ley federal que prohíbe la operación de TikTok en el país a menos que su empresa matriz china, ByteDance, venda la aplicación a un propietario con sede en EE. UU.
Esta decisión se basa en preocupaciones de seguridad nacional relacionadas con la posibilidad de que el gobierno chino acceda a datos sensibles de los usuarios estadounidenses.
ByteDance aún no ha encontrado un comprador, y la venta enfrenta restricciones debido a las leyes chinas sobre la exportación del algoritmo propietario de la aplicación.
El presidente Joe Biden ha declarado que no aplicará la prohibición de inmediato, dejando la decisión en manos de la próxima administración de Donald Trump, quien ha expresado su deseo de «salvar» TikTok mientras protege los datos de los usuarios.
El CEO de TikTok, Shou Zi Chew, ha expresado optimismo sobre una posible resolución y ha agradecido al presidente entrante por su disposición a colaborar.
La decisión del Tribunal Supremo destaca la compleja intersección entre la libertad de expresión y la seguridad nacional en el contexto de las redes sociales. Grupos de derechos digitales y creadores de contenido en TikTok han expresado su preocupación por las implicaciones de esta prohibición en la libertad de expresión y las operaciones comerciales.