Hoy, en el primer día de las vistas al nominado Robert F. Kennedy Jr. para la Secretaría de Salud de los Estados Unidos, pudimos ver exactamente lo que anticipábamos: un juego político donde los participantes ajustaron sus preguntas, comentarios y respuestas a conveniencia. Nada diferente a lo que ha sucedido en estas audiencias a lo largo de los años. No importa si el gobierno es demócrata o republicano, siempre se juega el mismo libreto, dejando de lado el verdadero propósito de evaluar a los candidatos y su capacidad. En lugar de eso, lo que se pone a prueba es qué tan bien siguen el guion tanto los congresistas como los nominados.
Nadie convencerá a nadie, y la suerte ya está echada. A lo largo de la historia, muchos buenos candidatos han sido rechazados, mientras que otros que jamás debieron haber llegado fueron confirmados. Esto nos lleva a preguntarnos: ¿sirven realmente estas audiencias a un propósito?
En el caso específico de RFK Jr., se espera que las vistas continúen por uno o dos días más. Hoy se vivieron momentos tensos, hubo aplausos hacia el nominado, abucheos dirigidos a algunos congresistas y hasta arrestos de personas en el público que interrumpieron la sesión.