¿Es la salud global el nuevo campo de batalla geopolítico? Todo indica que sí. Y China lo ha entendido mejor que nadie.
Con una donación de 500 millones de dólares a la Organización Mundial de la Salud (OMS), el régimen comunista de Beijing no solo busca proyectar una imagen de «solidaridad», sino consolidar su hegemonía global a través del dominio de la salud pública internacional.
Del origen del virus al control de la respuesta global
No olvidemos los hechos: el virus que paralizó al planeta salió de China, y múltiples informes ya reconocen que la hipótesis de un escape de laboratorio en Wuhan no es descabellada, sino altamente probable.
Estados Unidos decidió salirse de la OMS justamente por esa complicidad sospechosa entre la organización y el gobierno chino en las fases iniciales de la pandemia. La OMS protegió a China, validó sus cifras, repitió sus narrativas, y silenció las voces que exigían una investigación transparente.
Ahora, con Washington fuera de la ecuación, China ocupa el espacio dejado por EE.UU. y se convierte en el principal financiador del organismo. ¿Coincidencia o plan maestro?
La OMS: ¿Un organismo internacional o un brazo operativo de Beijing?
Mientras la OMS gana poder con el nuevo Tratado Pandémico —que permite imponer medidas sanitarias globales sin aprobación de los congresos nacionales—, China se posiciona como el nuevo titiritero detrás del telón.
Con 500 millones de dólares sobre la mesa, ¿cuánto poder de decisión está comprando China?
La ecuación es clara:
-
China financia.
-
La OMS dicta.
-
Los países obedecen.
-
Beijing manda.
¿Salud pública o control social?
China ha demostrado en su propio territorio cómo utiliza la salud como excusa para imponer control absoluto: códigos QR, vigilancia digital, cuarentenas forzadas, eliminación de derechos básicos.
¿Ese modelo será ahora exportado al resto del mundo con el sello de la OMS?
Trump y RFK Jr.: voces que advierten lo que viene
Mientras la mayoría de gobiernos guarda silencio o firma el tratado sin leer la letra pequeña, hay líderes que sí entienden el peligro de esta movida estratégica de China.
El expresidente Donald Trump retiró a EE.UU. de la OMS como parte de una política clara de recuperación de soberanía.
Y ahora, el líder del movimiento por la salud y los derechos civiles, Robert F. Kennedy Jr. (RFK Jr.), ha dado un paso al frente. En un comunicado reciente, hizo un llamado urgente a todos los países del mundo a que abandonen la OMS, calificándola de “organización secuestrada por intereses corporativos y por el Partido Comunista Chino”.
Kennedy ha sido claro: «Si entregamos nuestra salud a burócratas no electos, estamos renunciando también a nuestra libertad.»
Conclusión: China no está salvando la OMS. La está comprando.
Lo que está en juego no es solo quién financia la próxima respuesta sanitaria. Lo que está en juego es la soberanía de las naciones, la libertad de los pueblos y el futuro de la humanidad.
Mientras unos compran y otros venden, solo queda una pregunta por responder:
¿Quién gobernará el mundo… y en nombre de qué?
https://panampost.com/efe-panampost/2025/05/20/china-oxigena-a-la-oms-con-500-millones-de-dolares/