El jueves 6 de febrero de 2025, un avión Cessna Caravan de la aerolínea Bering Air desapareció en Alaska mientras cubría la ruta entre Unalakleet y Nome. A bordo se encontraban nueve pasajeros y un piloto. La aeronave despegó a las 2:37 p.m. hora local y perdió contacto aproximadamente una hora después, cuando se encontraba a unos 19 kilómetros de la costa, sobre el estrecho de Norton.
Las condiciones meteorológicas en la región eran adversas, con nieve ligera, niebla y temperaturas de alrededor de -8°C, lo que ha dificultado las labores de búsqueda y rescate. Equipos de la Guardia Costera de Estados Unidos, la Guardia Nacional Aérea de Alaska y rescatistas locales participan en las operaciones, tanto aéreas como terrestres. Sin embargo, el mal tiempo y la baja visibilidad han limitado las búsquedas aéreas.
Este incidente se suma a una serie de accidentes aéreos recientes en Estados Unidos. El 29 de enero, un avión comercial y un helicóptero del Ejército colisionaron cerca de Washington, D.C., causando la muerte de 67 personas. Dos días después, el 31 de enero, un avión de transporte médico se estrelló en Filadelfia, resultando en siete fallecidos.
La participación del FBI en la búsqueda del avión desaparecido en Alaska es notable. El Buró Federal de Investigaciones ha desplegado recursos técnicos especializados, incluyendo métodos para geolocalizar los teléfonos móviles de los ocupantes de la aeronave. Esta colaboración sugiere que las autoridades consideran todas las posibilidades, desde un accidente debido a las condiciones climáticas hasta otras causas que podrían requerir una investigación más profunda. La intervención del FBI podría indicar la necesidad de explorar hipótesis adicionales o asegurar que se empleen todas las herramientas disponibles para localizar la aeronave y comprender las circunstancias de su desaparición.
Hasta el momento, no se ha encontrado rastro de la aeronave ni se ha recibido señal de emergencia. Las autoridades continúan con las operaciones de búsqueda y rescate, enfrentando desafíos significativos debido al clima extremo y la geografía remota de la zona.
La participación del FBI en la búsqueda añade una dimensión adicional a la investigación, sugiriendo que se están considerando múltiples ángulos para comprender y resolver la desaparición de la aeronave.