Por José «Joe» Vargas
Nueva York, 17 de julio de 2025 – Maurene Comey, fiscal del Distrito Sur de Nueva York que formó parte del equipo que investigó la red de tráfico sexual de Jeffrey Epstein, fue despedida el 16 de julio por la administración de Donald Trump, según reportaron The New York Times y CNN.
Comey, quien trabajó en las acusaciones contra Epstein y su asociada Ghislaine Maxwell, no fue la fiscal principal, pero participó activamente en el equipo que solicitó la desclasificación de documentos relacionados con el caso. Estos documentos podrían revelar información sobre los clientes y trabajadores de la red de prostitución de Epstein.
Su despido fue notificado mediante una carta que cita el artículo II de la Constitución de EE.UU., sin incluir motivos específicos. Esto ha desatado especulaciones sobre una posible cacería de la administración Trump contra quienes podrían exponer detalles sensibles del caso.
Fuentes indican que el presidente ha expresado molestias por la presencia de Comey en su administración. Además, su despido coincide con críticas como las de la activista Laura Loomer, quien ha exigido que no se divulguen más documentos de Epstein.
Este movimiento ha levantado sospechas de que Trump busca silenciar a fiscales y funcionarios que podrían esclarecer la red de influencias y conexiones de Epstein, alimentando teorías sobre un posible encubrimiento de figuras prominentes vinculadas al caso.